En retrospectiva, las elecciones que uno hace tienden a presentarse como algo natural y hasta puede que revelen cierta coherencia. ¿Pero cómo fue, por ejemplo, que se hizo de River?
Nunca fue fanático del fútbol, de chico lo jugaba muy mediocremente - no en vano llegarían a apodarlo el cacique -.
De sus escasas visitas a una cancha, mantiene un vago recuerdo de la primera de todas, un partido de la C, Liniers (el equipo de su barrio natal) contra Arsenal "de Sarandí", el tendría cinco años y lo había llevado su abuelo, en esos tiempos se podía.
Su abuelo español era de Vélez, la afición del abuelo italiano nunca llegó a conocerla. Y sus primos, uno de Vélez y otro de San Lorenzo. ¿Su padre? De la Academia, pero poco interesado por su suerte.
Un querido tío, socio y seguidor fiel de San Lorenzo, y el resto de los tíos, de Racing. Entre los familiares cercanos, ninguno de Boca, ninguno de River.
¡Ah! Sí, de River era su madre, pero lo era tan tenuemente que no cree que haya influido en él.
También recuerda que antes de empezar el colegio, cada vez que le preguntaban de qué cuadro sos le costaba realmente pensar una respuesta, no estaba ni enterado de que ese mundo de pasiones deportivas existiese.
De sus escasas visitas a una cancha, mantiene un vago recuerdo de la primera de todas, un partido de la C, Liniers (el equipo de su barrio natal) contra Arsenal "de Sarandí", el tendría cinco años y lo había llevado su abuelo, en esos tiempos se podía.
Su abuelo español era de Vélez, la afición del abuelo italiano nunca llegó a conocerla. Y sus primos, uno de Vélez y otro de San Lorenzo. ¿Su padre? De la Academia, pero poco interesado por su suerte.
Un querido tío, socio y seguidor fiel de San Lorenzo, y el resto de los tíos, de Racing. Entre los familiares cercanos, ninguno de Boca, ninguno de River.
¡Ah! Sí, de River era su madre, pero lo era tan tenuemente que no cree que haya influido en él.
También recuerda que antes de empezar el colegio, cada vez que le preguntaban de qué cuadro sos le costaba realmente pensar una respuesta, no estaba ni enterado de que ese mundo de pasiones deportivas existiese.
Habrá sido por la insistencia de algún compañerito de la primaria que optó por la banda roja, aunque sus mejores amigos de entonces fuesen de San Lorenzo y de Boca. Luego, también por una cuestión barrial, fue socio de Ferro y hasta asistió un par de veces a la vieja tribuna de tablones.
Tuvo una vez un escudito que decía CARP y una foto autografiada de una gloria de la época. Pero no detecta ninguna razón fuerte para su decisión de identificarse con ese equipo. Sin embargo debe confesarse a sí mismo que este último año sufrió más de la cuenta.
Tuvo una vez un escudito que decía CARP y una foto autografiada de una gloria de la época. Pero no detecta ninguna razón fuerte para su decisión de identificarse con ese equipo. Sin embargo debe confesarse a sí mismo que este último año sufrió más de la cuenta.
* * *
Señaló que aunque podamos pensar que somos libres de actuar como queremos,no podemos determinas qué es lo que queremos (y si deliberadamente "queremos querer" algo, está el problema habitual de regresión a un "querer" primario). En algún momento tus deseos tienen que ser sólo algo dado: el producto de la herencia y la educación. Por consiguiente, la idea de que alguien es el responsable verdadero y último de sus actos es insostenible; a lo sumo tenemos una responsabilidad transitoria y superficial, y hasta ésta, con el tiempo, revelará que es un error. G. bien podría haberme citado la conclusión de Einstein de que "un Ser dotado de una comprensión más profunda y una inteligencia más perfecta, al observar a los hombres y sus acciones, sonreiría ante la ilusión humana de que están actuando conforme a su libre albedrío".
("Nada que temer" - Julian Barnes)
Qué curioso... el tema que "eligió" (¿habrá sido así?)o, mejor dicho, el ejemplo con que lo ilustra, siempre me ha llamado la atención: ¿qué hace que alguien se haga hincha de un equipo de fútbol? ¿qué le ofrece ese equipo, que se distinga de lo que podría ofrecerle cualquiera de los otros? Descartada la herencia ("mi abuelo... mi padre... mi etc. eran de...") o la necesidad de pertenencia a un grupo ("mis compañeros de la escuela son mayoritariamente de ..."), ¿por qué elegir ese club y no otro? ¿son los colores? ¿los cantitos de sus hinchadas? ¿su condición de grandeza y superioridad o de humildad y garra?...
ResponderEliminarPara quien , como yo, el universo del fútbol le resulta ancho y ajeno, este misterio se ahonda aun más.
Aunque, pensándolo bien, tal vez no diste mucho de otros misterios... como el amor, la amistad, o las inasibles razones por las cuales hoy "elegí" vestirme de rojo (sin connotaciones futboleras).
Un beso y me alegro por los que hoy están tan alegres :)
El universo del fútbol está hoy mucho más presente en la sociedad que cuando yo era chico (vía televisión) y es más difícil sustraerse a su influjo. De todos modos, si no le picó el bichito, ¡feliz de Ud.! Salut, Betina.
EliminarNo sé cuanto hay de elección, cuanto de azar o de complacencia en este tema. Yo fui de River pero enseguida me hice de Racing para agradar a mi viejo, o quizá, por algún suceso particular que mi viejo indujo sobre mí para transformar mi gusto, creo que fue algo así. A veces tiendo a pensar que debería ser de Boca. Así que...
ResponderEliminarUna respuesta genial se la oí a Sergio "Cachito" Vigil, ex entrenador de Las Leonas. El es "de River, pero también de Boca": ¿por qué renunciar a reconocer y admirar las virtudes del rival? Saludos, Darío.
EliminarEn mi caso, debo dar la razón a Barnes. Soy de San Lorenzo porque mi viejo lo era pero (y no creo que haya influido en la elección), casualmente, el conde también es cuervo y nuestra descendencia es azulgrana, obviamente. Para completar el cuadro, mi única cuñada casóse (ja) con otro hincha de San Lorenzo y sus 3 hijos, también lo son; por lo cual, si nos reunimos todos, tenemos una mini Buteller.
ResponderEliminarHay condiciones y hay destinos, hay casualidades o atracción de iguales, vaya uno a saber.
Lo que sí sé es que, después de lo de ayer, no estoy para comentarios muy profundos pero,
aunque ganes o pierdas...¡qué lindo es ser del Ciclón!
Beso, Rob
Lo que nunca pudieron es parar esta hinchada
Eliminarque se hizo gloriosa en las buenas y malas.
Un beso condesa!
Ud. recuerde el refrán: "cría cuervos..." Le deseo lo mejor en esta semana difícil. Salut, Condesa.
EliminarMi hermano me enseño a decir "Boca", dicen que fue mi primer palabra y ademas adoro a mi hermano. Cuando fui a la cancha la primera vez ya estaba bastante crecida y no olvido esa noche y el canto de la hinchada que te hace vibrar. Con Pichón Riviere lo aprendí amar desde otro lugar.
ResponderEliminarMiro fútbol desde ese lugar aprendido y la verdad lo disfruto, pero hoy si me pregunta, no soy de ningún equipo, porque boca es un sentimiento.
Un beso.
A Ud. le inocularon la pasión de chiquita, contra eso nada se puede. En cuanto a los sentimientos, de eso trataba un poco esta entrada: no elegimos lo que sentimos. Tal vez no haya remedio. Beso, Cecy.
EliminarSin duda nos viene casi todo dado. Pero en ese “casi” está la respuesta a todo. Debe haber un resquicio de libertad que justifique la mala -o buena- sangre que nos hacemos por la vida. Por lo demás, yo soy de River (socio, hincha, fanático, enfermo) y mis pequeños hijos varones también. Ellos no podrían ser de otro cuadro, tal es mi determinación. Sin embargo, yo podría haber sido tranquilamente de San Lorenzo, como mi abuelo, o de Argentinos Jrs., como mi mejor amigo de la infancia, pero soy de River, tan de River que evidentemente de algún lado me viene (mi viejo es de River, pero tenuemente).
ResponderEliminarUn feliz abrazo gallina.
Siendo Ud. de River, le pido un favor: ¿no puede encargarle a su amigo JWL III (h) la composición de un himno al club, para olvidarnos de esa boba cancioncita de Copani? Abrazo gallina.
EliminarIntuyo que JWL III (h) se entusiasmará mucho con semejante desafío. Quizás incluya un párrafo en dialecto balcánico, como gesto para los hinchas de ultramar.
EliminarAbrazo!
Bueno....le cuento. Mi viejo, jugador de las divisiones inferiores de San Lorenzo en la década del 40, sparring de la selección nacional de aquella época....y conocedor del mundo de cabarets y alcohol de los jugadores ( algo con más clase que hoy, supongo) me llevó de pequeño al Viejo Gasómetro. Esa experiencia de subir los tablones de su mano no me la puede quitar nadie.
ResponderEliminarEl me llevó de chico, yo lo llevé de viejo. Y cuando se fue sus cenizas esparcí en la cancha.
Gracias Rob por traerme estos recuerdos.
Muy fuertes esas experiencias tuyas, Dany. El Viejo Gasómetro era la cancha que yo divisaba a lo lejos desde la ventana de mi dormitorio de infancia y adolescencia, cuando vivía en Caballito. El muy querido tío "cuervo" que nombro falleció la tarde del último campeonato de CASLA, creo que esperó hasta ese momento para irse. Les deseo la mejor suerte en los 180' que restan. Abrazo.
ResponderEliminarGracias Rob!! Igual acepto a aquellos que no nos deseen suerte y quieran vernos en la B ( nuevamente) porque forma parte del folklore y no me enoja. Mi viejo hablaba poco......casi nada pero cuando contaba anécdotas de aquella época era impagable, lástima que me avivé tarde.
EliminarAbrazo.
Lo mío viene así... no soy de ningún cuadro, pero algo en mi corazón me lleva a ser "antibostera". En casa: mamá re gallina, papi que era de Independiente, mi hno que es más fierrero pero era de Newells a los cuatro años y nadie entendía cómo, porque ni en el jardín de infantes tenía compa de ese club. Y mi abuelo adorado era de quién fuera campeón de turno.
ResponderEliminarPero recuerdo cuando recuerdo o escucho un partido por radio, se me ponen los pelos de punta! De chica no soportaba que mis viejos pusieran la radio con el relato del partido, encima el relator, insoportable! Así que debo decir que futbolera "cero". A tal punto que recuerdo haber salido una tarde y no encontrar a nadie en la calle... parece que era una final de un mundial! jajaja
Besos querido! Por fin pude pronunciarme!!!!!
pd: igual un cariño les tengo a los millo, así que van mis felicitaciones (por cierto, mi madre se puso a llorar) Cuando esté el nuevo himno listo, obviamente se lo haré escuchar!
Me encanta esa fidelidad cambiante de tu abuelo, había encontrado el secreto para disfrutar y nunca sufrir. Deberíamos imitarlo. Esperamos todos ese himno de JWL III (h). Besos.
Eliminarmi viejo era de river, yo lo adopté porq sí, porqué él era hincha de la banda. Mi vieja decía ser de Boca, pero en esos decires siempre terminaba hablando del viejo y de su amor por la camiseta. Por allí, si hablo de influencia debería haber sido del mismo cuadro que ella (me cuesta escribirlo) porque la tuve más tiempo y mal o bien siempre le tiraba el equipo
ResponderEliminarpero no, heredé la ilusión y el amor casi fanático por su club y aquí estoy, feliz de haber vuelto a primera después de haber sufrido un año que duró como diez
un abrazo
Bienvenida, Laura. Es cierto eso de que los años en el infierno parecen más largos, pero por fortuna (y porque los offsides y los agarrones flagrantes en el área no siempre se cobran) ya salimos. Abrazo.
EliminarMenos mal que por fin lo encuentro che, me metí en La meresunda y no cazaba un fulbo (muy a propósitamente de la cuestión tratada en este post). Al baño con piano de cola no, pero tiene la opción de un tecladito de esos que suenan como un Steinway. Igual no se lo recomiendo je.
ResponderEliminarY solo decir que concuerdo con el Sr. Barnes, es muy poco el margen de elección real que tenemos quelotiró! Y aguante La Lepra! que no entiendo nada de futbol pero toda la family es de Ñuls y yo adherí.
un saludo
Hola, bienvenida, Any. Veo que Ud. entiende bien del tema, si nombra a Steinway. Y el libro de Barnes es muy recomendable y disfrutable, si bien esa que puse ahí es una cita muy tangencial. Saludos.
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